El Holocausto de nuestro siglo, sin duda alguna, es Palestina; al genocidio infanticida cometido por Israel en Gaza se le suma ahora el brutal ataque contra el centro de refugiados en Rafah

Rafah, una pequeña extensión de tierra en el sur de Palestina lindando con Egipto, alberga a  cerca de un millón y medio de desplazados, que llegaron desde Gaza. El pueblo palestino bombardeado y masacrado, rozando las 40.000 muertes, cerca de 15.000 desaparecidos, y con la aún peor tragedia de saber que más de la mitad de todas estas víctimas son niños

El salvaje accionar del gobierno sionista de Netanyahu no tiene lógica ni piedad. La única comprensión que se puede alcanzar viendo este genocidio es la maldad más desquiciada y enferma. En pocos medios o redes sociales, se llegan a ver las brutales imágenes o vídeos de bebes, niñas y niños hechos pedazos.

El hambre enemigo

Este 1 de Junio, murió el pequeño Abdul Qader Al-Sarhi de 13 años, en el Hospital los Mártires de Al-Aqsa en Deir Al-Balah, centro de la Franja de Gaza , debido a la desnutrición y la falta de tratamiento ante el cierre del cruce de Rafah por parte de Israel.

La decisión de la ONU

La Corte Internacional de Justicia de la ONU, en conformidad con las obligaciones que establece la convención sobre genocidios, ordenó al régimen sionista que detenga su ofensiva en Rafah de forma inmediata; dando lugar a la denuncia hecha por Sudáfrica!

Tras la orden de la corte internacional de justicia y después de un primer ataque de Hamás a Telavid, las fuerzas israelíes arrasaron con los campamentos en Rafah, incinerando a personas vivas, mujeres, niños calcinados, niños fragmentados, decapitados. El horror más espeluznante del que la humanidad haya sido testigo. Estamos viviendo tiempos tan sangrientos y despiadados que ya casi es imposible no mantener los ojos abiertos.

Con la excusa de que en Rafah están los últimos dos batallones de Hamás, siguen asesinando de la forma más cruenta, extendiendo este genocidio pavoroso, a los ojos de un mundo petrificado. 

Y ¿quién nos dice que Israel no es capaz de hacer lo mismo con cualquier otro país?, cualquier otra gente?, amparados en que son el pueblo elegido por su dios de podredumbre.

En el norte de Gaza suceden las batallas más duras. Según expertos a 8 meses de este genocidio, han logrado matar al 30 o 35 por ciento de las fuerzas de Hamás y siendo Israel el tercer ejército más poderoso del mundo aún no ha logrado derrotar a la fracción más pequeña en el eje de la resistencia, esta es la razón por la que masacra civiles, porque es lo único de lo que es capaz.

El diablo desde dentro

Israel aún no tiene constitución, es una creación ficticia con una ideología supremacista que corrompe todo. En el gobierno y la sociedad israelita hay grietas muy profundas, que ya existían antes del 7 de octubre. En ese entonces Netanyahu pretendía sacarle todo el poder a la corte suprema y concentrarlo en el parlamento israelí que el mismo dirige.

Estas fracturas hoy se continúan profundizando. Uno de los temas candentes es el de los rehenes israelíes que están en Gaza, quienes podrían haber sido asesinados por los propios bombardeos, y a quienes el gobierno no se ha esforzado nunca en encontrar porque claramente le sirve tenerlos allí, porque es la única manera de que el pueblo israelí apoye a su gobierno infanticida, es la excusa también para seguir atacando a Palestina. Netanyahu busca sostenerse en el poder a costa de todo, su plan de destrucción masiva también es en cierta forma un suicidio.

El Norte de Israel está completamente vacío, al punto de que las mismas autoridades han dicho que el gobierno de Netanyahu ha fallado en protegerlos y han adoptado una postura independentista.

En el norte la lucha se da contra las fuerzas de Hezbolá, con un poder muy superior al de Hamás.

¿Quién manda a quién?

Por su parte Estados Unidos pareciera no tener control alguno sobre Netanyahu, pero sin embargo continúa enviándole armas. Entonces, todas estas contradicciones entre los dichos y los hechos nos demuestran claramente, que hay una complicidad total entre ambos gobiernos, que  accionan aún en contra de sus pueblos porque gobiernan para un poder más siniestro que está por encima de todos ellos y que maneja la fétida industria del armamento.

La cuestión Iraní

Israel ha intentado ingresar a Irán en este conflicto, provocándolo con ataques, asesinando a miembros de sus fuerzas, incluso aún se mantiene la incógnita sobre la misteriosa muerte del presidente Iraní que ha sido un accidente demasiado oportuno- Ebrahim Raisi falleció en un accidente de helicóptero el 19 de mayo de este año-. 

Pero hasta ahora a Irán no le ha interesado meterse en este conflicto y se ha mantenido sumamente cauteloso.

Si leemos con atención el accionar de Israel no difiere mucho del resto de los gobiernos de la OTAN y Estados Unidos,  provocando y creando conflictos bélicos en tantos países, buscando claramente una guerra total con el peligro de llegar a la temida guerra nuclear. El lema parece ser, contra todos y a costa de todos.