- Ana sos escritora, gestora cultural, defensora de los derechos humanos, ¿cómo ha sido tu camino dentro del Arte y de la Cultura en todos estos años?

   - Mi camino empezó de muy chica, tenía el apoyo de mi padre, no económico porque nací en un hogar de trabajadores, pero si, como él amaba la literatura y todas las manifestaciones del arte, me impulsaba a seguir escribiendo. No me hacia quedar con su palabra nada mas, me enviaba a ver y presentar mis trabajos algunos de sus amigos periodistas y ellos me daban su parecer, luego en la etapa escolar, tuve el estímulo de las maestras en la hora de lenguaje siempre me hacían ver que tenía una base y que debía desarrollarla, ellas me indicaban lugares sobre talleres literarios, lo mismo paso con las profesoras de literaturas. Les llevaba a su casa mis trabajos que iba a presentar en un concurso y me daban su opinión, siempre me decía, una que recuerdo con mucho cariño, te indico, te marco, pero la última elección o decisión es tuya.. recordá siempre que vos sos la autora.

   Puedo decir que tuve suerte al haber encontrado estas personas en mi camino. me incentivaron a seguir. después la vida, los compromisos, el hogar, mi hija, enfermedades de mis padres, etc.... me restaron tiempo para dedicarle a la escritura.

   Siempre en el hogar en el que me crié, tuve una educación de ayuda hacia los demás, de socorrer al más débil, y la defensa de los derechos humanos.

   Más tarde en las casas de estudio en las cuales me capacité, cuando se reunían para reclamar derechos, me unía a la militancia o proclama

   Siempre fui poeta desde los inicios, participé en concursos literarios en algunos recibí menciones y en otros nada, así fui haciendo mi camino en las letras.

   Avanzando en los años cuando veía un encuentro de poetas, como el de Perù, te hacían presentar tres trabajos y ellos tenían un jurado que elegía. en ese de 2013 fui seleccionada y me pagaron todos los gastos. fue una experiencia maravillosa. Me interrelacioné con poetas de todas partes del mundo. Luego, siempre haciendo cursos o talleres literarios , como el de SADE San Luis, me invitaron a un Congreso de Poetas en Concaran, gané un Premio por un ensayo sobre el poeta Esteban Agúero.

   Al tener muchos poemas escritos, me vi en la necesidad de editarlos, tuve la suerte de tener un primo en tierra del fuego, Jorge Navone, hoy desaparecido. El me asesoró, me editó los primeros libros y me cobraba muy poco, cosa importante para el que no tiene recursos.

     - ¿Qué te decidió a publicar tu primer novela?

   - Me inspiré en una pintura de Edward Hooper, justo comienzo a escribirla en el momento que se enferma mi visión y estuve mas de tres años con la "Señora de verde" asi se llama.

    La tapa, es un homenaje a la pintura de Edward Hooper, quien pinto la soledad y el aislamiento que las grandes urbes, producen en el ser humano. el nació y murió en nueva york. me deslumbraron sus pinturas, pero la que se identifica como la tapa de mi libro es una mujer que viaja sola en un tren lejos de la ventana (o sea aislada del mundo exterior)

     -¿Cual es la temática del libro? 

     Se trata de tres personajes que se entrelazan en vivencias comunes y los une el dolor que cada uno vivió y vive en su vida particular, y la soledad, por eso Hooper, el gran pintor de la soledad y el aislamiento del ser.      

    -¿ Qué géneros literarios te atraen más a la hora de escribir?

     -Te digo que la poesía, la siento como parte de mí, como si fuera mi sangre corriendo por mis venas. Veo algo, siento algo, palpo y me surgen metáforas, comparaciones, figuras retóricas diversas. Es una gran emoción que llena nuestra mente y todo el ser en vuelos magistrales.

   La narrativa es otra cosa, es estar en una historia armada con ficción, pero cuánto le ponemos de nuestras propias vivencias, tal vez con palabras diferentes, con nombres cambiados, con etapas históricas que no corresponden, pero seguimos siendo nosotros en cada personaje, en cada acción. ahí estamos. Eso es lo que apasiona y te atrapa, no podes dejar de escribir, no se puede, porque uno quiere seguir la aventura, o la vida, o el amor, o la muerte que está viviendo el personaje. Para mi es fascinante.

     -¿y cómo unís todo esto, con tu mirada siempre apuntando a lo filosófico y social?                                      -Lo filosófico y social, no lo puedo evitar. Va con mi esencia, va con mi navegar dentro de una pintura, un poema, un texto y tratar de llegar al mensaje más profundo del autor o autora, y lo social me conmueve, me irrita, cuando veo las desiguales, la discriminación, cuando veo que nadie se ocupa del otro. Es que hoy vivimos en un mundo muy cruel, con mucha violencia, que a nadie le importa del otro, lo que menos les importa es la vida humana.      

     - Siempre ha sido una lucha el ambiente cultural, la autogestión. ¿Cómo ves el país en estos momentos respecto a la cultura, y la ciudad?

    -El panorama se presenta confuso o demasiado claro. para que haya un cambio debe ser muy profundo, porque todo esta digitado por las grandes empresas, por los grandes imperios, nadie es libre, la libertad como la paz es una utopía, si bien hay grupos que accionan para lograrlas, no alcanza, porque es tanto lo que han transformado nuestras costumbres, nos han invadido culturalmente, hace muchísimos años y entonces es muy difícil. Tengo esperanza que la juventud se juegue por sacar todo lo foráneo y volver a lo nuestro.

    - ¿Y cómo ves el desarrollo de la mujer dentro de esto?  

    -La mujer va adelante, pienso que ella puede lograr un avance en todo lo que me explayé, pero no debe dejarse llevar por los cantos de sirenas, que la confunden y la pueden trasladar al ámbito del mercado, donde todo se compra y se vende. He tenido experiencias con mujeres que han entrado en ese juego perverso. Entiendo la necesidad del dinero, pero no estoy de acuerdo, no se puede lucrar en nombre de los derechos humanos.

     Por último agrego que, la mujer ha logrado mucho en los últimos tiempos, que se asegure esos derechos adquiridos y que siga luchando para su bienestar, pero también para el de los otros que no tienen voz y son sombras nada más.