Criadores de guerras
Como si fuera un animal, así Occidente cria la guerra, la alimenta, la reparte a diestra y siniestra. Ese sabor amargo que va dejando un rastro de muerte en el mundo, con varios focos y en todos participa por supuesto la OTAN, que no detiene su ofensiva contra una Rusia que, de alguna manera, intenta contenerse.